No hay dos casos de ortodoncia iguales, por ello es necesario hacer un estudio individualizado de tu caso para determinar el plan de tratamiento.
Antes de empezar cualquier tratamiento de ortodoncia realizamos un escáner intraoral de tu boca, una radiografía lateral de cráneo y panorámica, así como fotografías faciales y dentales.
En algunos casos también puede ser necesario un 3D.

Siempre dedicamos el tiempo que sea necesario a explicarte el plan de tratamiento y tu situación de partida.
Queremos que nos preguntes cuantas dudas tengas.
Además, los presupuestos de los tratamientos de ortodoncia son siempre cerrados y disponemos de opciones de financiación.

En esta cita se colocan los brackets, se entregan los alineadores transparentes o aparatos de ortopedia según la técnica de ortodoncia y se repasan las recomendaciones asociadas a cada técnica de ortodoncia.

El tiempo entre revisiones puede variar entre 4 y 8 semanas según el momento de tratamiento y la técnica empleada.
Al inicio del tratamiento es habitual que las revisiones sean más frecuentes, mientras que a medida que va avanzando se van espaciando más en el tiempo.
En la ortodoncia con alineadores transparentes se suelen espaciar más las visitas.

Es el día que se retiran los brackets o se finaliza el tratamiento con alineadores transparentes.
Ese mismo día, te llevarás contigo los retenedores de ortodoncia que tendrás que seguir usando según las indicaciones para tu caso, para mantener los resultados conseguidos y evitar movimientos indeseados en tus dientes.

Una vez finalizado el tratamiento, nos gusta ver a nuestros pacientes por lo menos una vez al año.